Una política de gestión de recursos humanos que valore el talento deberá abordar y adoptar los conceptos de inclusión y diversidad, fundamentales para impulsar la productividad de las organizaciones, facilitar la evolución e innovación, así como para diferenciarse del resto de competidores.
Utilizar la diversidad y la inclusión como herramienta para conseguir una mayor competitividad y productividad es una muestra de innovación del desarrollo económico de la organización. Ante mercados competitivos y diferentes, una ventaja es diferenciarse por hacer realidad la diversidad e inclusión en el recurso humano.
Como muestra del interés empresarial por la diversidad y la inclusión presentamos el trabajo realizado por la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi) y la embajada de Estados Unidos de América en Colombia. En 2012 firmaron un acuerdo de cooperación con el objetivo de establecer una colaboración para promover políticas, programas y proyectos que fortalecieran el aprecio y la comprensión del valor de la diversidad, equidad e inclusión de la comunidad empresarial.
A día de hoy ya se pueden valorar primeros resultados del acuerdo. Se han invertido más de 5 millones de dólares y generado más de 1.500 empleos. Según palabras de Santiago Pinzón Galán (Director Ejecutivo, Cámara de Procesos Tercerizados/BPO&IT, Andi) “Estamos aprendiendo que gestionar la diferencia, permitirla e instrumentalizarla, a través de un protocolo de diversidad, aprovecha el gran talento que Colombia tiene, gracias a sus diferentes culturas, cambia vidas y empresas, al fortalecer la filosofía en la organización, al mejorar la reputación y credibilidad de la compañía, así como su acceso a nichos de mercado, al atraer y conservar personas con mucho talento, motivadas, eficientes, así como a estimular los ambientes de intercambio creativo e innovador entre los trabajadores”.